Cebolla-Castillo de Villalba
PRINCIPALES ATRACTIVOS
La visita a sus ruinas es la oportunidad de conocer un emplazamiento que usaron por igual los romanos, para vigilar la vía Emérita Augusta, que unía Toledo con Mérida, los musulmanes para proteger el Califato de Córdoba de los cristianos, y éstos para avanzar su conquista hacia el sur.
HISTORIA Y DESCRIPCIÓN
Aún podremos apreciar los restos de su barrera exterior. De las cuatro torres que coronaban sus esquinas sólo queda una en la fachada principal, mientras que las torres rectangulares centrales sí se conservan. La puerta de acceso, con arco de medio punto, está protegida por dos torres. El interior está destruido.
De origen musulmán, aprovechó estructuras de época romana. Fue de la orden del Temple tras la reconquista.
ACCESO
Acceso libre
CURIOSIDADES
Desde su altura podemos contemplar la vega del Tajo, y comprender el antiguo nombre de Cebolla, Villalba, pueblo blanco.
Nuestra ruta arranca en Cebolla por la Calle de San Illán que nos lleva a la Ermita de la localidad toledana.
Estos bancos nos muestran que atravesamos un lugar muy transitado, no en vano, es lugar de peregrinación la Ermita de San Illán.
Al llegar a un cruce nos saldría la desviación hacia San Illán, nosotros giramos a la izquierda en dirección a la CM-4015 dónde nos encontramos un camino bastante complicado.
A medida que nos acercamos a la Carretera CM-4015 el camino mejora.
Al llegar a la Carretera CM-4015 giramos a la izquierda y caminamos por ella durante casi dos kilómetros. La indicación que tendremos será visual pues al ver el Castillo deberemos atravesar un olivar.
